¿Vuelven o es que al final siempre están?  porque los zapatos «Mary Jane» siempre se siguen viendo, en mayor o menor medida,  temporada tras temporada, pero este Otoño/Invierno en concreto vienen con fuerza.

El origen de este zapato se remonta al siglo XVI, era un zapato infantil, con pulserita para que no se salieran y lo usaban dinastías como la de los Tudor. Pero ya a principios del siglo XX, las mujeres empezaron a utilizarlo con un poco de tacón para bailar, por su comodidad y la sujeción del pie.

Y fue aquí cuando comenzaron a llamarse «Mary Jane» por un personaje de comic muy popular (Mary Jane Brown) que siempre los llevaba.

¿Y sabes por qué en España les llamamos Merceditas?  pues fue porque María de las Mercedes, los llevaba el día de su boda con el Rey Alfonso XIII,   ya que con los nervios de la boda temía perder los zapatos. Ya sabéis que la pobre murió 5 meses después de su boda con tan solo 18 años.

En los años 60 volvieron a triunfar con las minifaldas y, como este O/I la estética 60 vuelve a ser icono, no te pueden faltar unos. Lúcelos así, estilo Twiggy.

En los 90 fue Manolo Blahnik el que volvió a convertirlos en tendencia, os llamaba Campari y una década después fueron protagonistas de un episodio de Sexo en Nueva York lo que volvió a incrementar sus ventas.

Este año Saint Laurent ha creado unos «Mary Jane» con glitter y tacón bajo, lo que potencia ese toque aniñado. A mi no me pueden gustar más.

O la opción de Miu Miu, también con purpurina y algo más de tacón.

Pues si te gustan y no quieres hacer la inversión de comprarte los de Saint Laurent, puedes optar por estos de Stradivarius….claramente inspirados en los de Saint Laurent, por 29,95 €. Los puedes comprar AQUÍ.

También los tienes disponibles en muchas otras marcas asequibles sin que lleven brillantina que no a todo el mundo le gusta. Una buena opción serian en charol negro o rojo. También el piel o ante negro. Será una buena compra de «fondo de armario». Estos de Mango cuestan 29,90€ AQUÍ

¿Qué os parecen’ ¿Os gustan? a mi me encantan porque son femeninos y con ese toque aniñado que con una súper minifalda y medias tupidas queda fenomenal. Yo ya tengo los míos…y con purpurina claro! Me despido con esta reflexión que me enseñó un profesor en la Universidad, Joaquín Arozamena, y  que tengo presente tanto para mi programa de radio como para mi vida. Besos y hasta el Lunes.